Maria Magdalena

VIÓ la piedra corrida del sepulcro y CONFÍO, siendo la primera testigo de la Resurrección. LLORÓ porque el Señor no estaba en la tumba y ESPERÓ el encuentro. PERFUMÓ los pies del Señor y CUSTODIÓ su fragancia y su mirada amorosa en el corazón. ESCUCHÓ su nombre en los labios del Maestro y ACEPTÓ ser … Leer más